El Atlético de Madrid afrontaba un partido bastante complicado con la sensación de que el Real Betis y el Rayo Vallecano se estaban acercando mucho en la clasificación. La victoria era ya casi una obligación, puesto que no disputan más competiciones y su único foco es la liga. El Celta de Vigo en tierras gallegas era un duro trámite para los de Simeone, pero estaban dispuestos a llevarse los tres puntos por muy difícil que se pusiera el partido.
Efectivamente, se puso bastante complicada la tarea para el Atlético de Madrid en la primera mitad. De hecho, el Celta tenía más presencia en campo contrario y los rojiblancos no fueron capaces de rematar a puerta en los primeros 45 minutos. Pero si el asunto parecía complicado, se iba a poner aún más difícil en la segunda parte.
Simeone dio entrada a Carrasco y Depay en sustitución de Pablo Barrios y Morata, aunque lo que no vio venir Simeone fue la expulsión por tarjeta roja directa de Savic en el minuto 70. Además, el técnico argentino también fue amonestado por protestas ante esa roja.
Cada vez el partido se ponía más de cara para el Celta de Vigo, que al mismo tiempo incrementaba sus ataques a la portería de Oblak. Sin embargo, en una jugada de ataque de Carrasco quedó un balón muerto en el área pequeña que fue capaz de rematar Memphis Depay. El balón entró, por lo que el Atlético de Madrid se llevó los tres puntos con un gol en el minuto 89. La importancia de ese gol de Memphis es crucial, ya que sitúa al Atlético cuatro puntos por encima de su inmediato perseguidor, el Betis. Los siguientes retos de los hombres de Simeone son el Athletic y el Real Madrid, por lo que ahí deberán demostrar su capacidad para estar en puestos de Champions League.
Esta web ofrece contenido sobre apuestas disponible solo para mayores de 18 años.
