Inglaterra era, antes de iniciar la Eurocopa, favorita para ganar la competición. La calidad de sus jugadores era aval suficiente para pensar que podrían conseguir grandes cosas en el torneo, aunque lo cierto es que todo se está poniendo más gris de la cuenta para los ingleses. Su debut fue con una victoria por la mínima ante Serbia, que no sirvió para mostrar su gran potencial. Y su segundo partido ha sido la señal de que Inglaterra no está dando todo lo que hace falta para levantar un título internacional.
Volvían a ser favoritos para ganar, en este caso ante Dinamarca. Con una victoria, aseguraban su presencia en los octavos de final como primeros de grupo. Los hombres de Southgate lo tuvieron claro desde el principio y empezaron el partido acosando ofensivamente a los daneses. Tanto es así que, en el minuto 18, Kane lograba adelantar a Inglaterra en el marcador.
Ese gol parecía ser la llave para una cómoda victoria. Pero nada más lejos de la realidad. En el minuto 34, Hjulmand se sacó un gran disparo desde fuera del área para marcar uno de los goles de esta Eurocopa. También ponía el empate de nuevo en el marcador, algo que no le sentó muy bien a los ingleses.
En lo que a ocasiones claras se refiere, los daneses estuvieron más cerca de llevarse los tres puntos que Inglaterra. Al final, ninguno fue capaz de lograr la victoria y el empate de puntos sigue dejando a Inglaterra como líder. Pero Dinamarca y Eslovenia podrían adelantarles en la última jornada, algo que parece difícil, pero no imposible. La victoria de Inglaterra en la última jornada ante Eslovenia tiene una cuota de 1.38 euros por euro apostado, lo que sigue indicando su gran favoritismo. Aunque es evidente que no se pueden confiar.
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